CON LA MOVILIZACIÓN Y EL PODER POPULAR, ROMPAMOS CON EL REGIMEN
¡NO A ESTE GOBIERNO NI A NINGUN OTRO, QUE NO CUMPLA CON LOS DERECHOS DEL PUEBLO!
LA LUCHA ES EL UNICO CAMINO
Video:
Compañeras y compañeros, vecinas y vecinos de Zaragoza
Estamos hoy aquí asistiendo unidas para evidenciar lo que en los últimos años hemos ido viendo y por lo que hemos salido a las calles una y otra y otra vez. La movilización continua siempre en pugna por la conquista de los derechos que nos han sido arrebatados, ha conseguido ir resquebrajando el Régimen del 78 hasta situarlo hoy en una posición de disyuntiva total.
Después de las elecciones del 26 de junio la voz del pueblo y la interpretación que pretenden hacernos del resultado de las mismas ver es radilcamente diferente. Las gentes de este Estado con su voto o sin él, en aquella ocasión no le dieron el respaldo a un gobierno del Partido Popular, éste no ganó, perdió votantes y aún así nos la quieren colar.
Lo que evidenció el resultado de aquellas elecciones es que la mayoría de nuestra sociedad quiere cambios hacia políticas socialmente justas. Hemos vivido con estupor los tejemanejes que se han dado en el seno del PSOE para permitir el gobierno de Rajoy y las acrobacias en el primer debate de investidura para justificar lo injustificable. En la primera sesión de investidura el PSOE sólo pudo argumentar su abstención en términos de ‘’necesidad de un Gobierno’’. Hoy hemos sido espectadores de otra nueva entrega de este relato que forma parte de una estrategia para dar aire a un régimen que está tocado pero no hundido, la renuncia de Pedro Sánchez no es un ejercicio de coherencia, es otro paripé. A muchas personas de este Estado su propio partido les está robando el voto y con ese robo -perpetrado por las élites encarnadas en personajes como Felipe González- pretenden condenarnos una legislatura más a sufrir más recortes, más represión, más precariedad y más desigualdad.
La tragicomedia de Pedro Sánchez es la segunda edición de la de Zapatero arrodillándose en 2010 ante Obama y la UE. El resultado: el mismo. Un PSOE que puede – y lo ha hecho mil veces – disfrazarse con lenguaje izquierdista, para después, siempre, llevar a cabo las políticas sociales más duras y la represión más feroz, guerra sucia incluida.
El Comité Federal del PSOE del domingo 23 de octubre evidenciaba netamente que los dos partidos turnistas eran controlados y dirigidos por una misma fuerza: los poderes económicos.
La democracia se viste hoy de lagarterana en España cuando se pretende tomar el Gobierno del Estado por miedo a unas terceras elecciones o a que el pueblo se exprese ya sea a través de las urnas o en las calles como hoy lo estamos haciendo. Y lo estamos haciendo a falta de una posibilidad de expresarlo de otra forma, así que lo decimos alto y claro ¡no queremos un gobierno del partido de la corrupción!.
Ya vivimos un golpe de estado velado cuando PP y PSOE se pusieron de acuerdo para modificar el artículo 135 de la Constitución, hoy presenciamos una nuevo episodio de este idilio político que se ha gestado fuera de las instituciones democráticas.
En la primera sesión de investidura de Mariano Rajoy se hizo más patente aún esta cuestión cuando el PP declaró que ‘’en los asuntos importantes siempre están de acuerdo’’. Fin de la cita. Y lo cierto es que siempre ha sido así. PP y PSOE se han coaligado a la perfección desde 1982 para parecer dos cosas distintas y sin embargo llevar a cabo la misma dirección política: un desarrollo del entramado de corrupción concediendo beneficios a las grandes empresas y, en paralelo, una destrucción continúa de derechos civiles, sociales y laborales, algo que sin duda han favorecido también a los más poderosos.
Quien decidirá en la segunda votación de la investidura hoy no serán los pueblos del Estado Español, sino las élites que dirigen la economía. La poca soberanía que le quedaba al Estado Español será puesta a los pies del IBEX 35.
El Régimen está en crisis, y la segunda investidura de Mariano Rajoy se presenta ante nosotras como un auténtico golpe de Estado de las oligarquías, las cuales no están dispuestas a perder ni un solo gramo de ganancias obligando así a que se dé un pacto entre el PP, el PSOE y Ciudadanos. Los partidos del IBEX 35, de la corrupción, de la explotación laboral y de las enormes ganancias se unen para una vez más hacernos pagar la factura de sus privilegios vistiéndola de crisis.
Así que si el Régimen se rompe, es hora de que le demos un último golpe. Ante esta situación consideramos que la verdadera democracia y el verdadero patriotismo es de las personas que expresamos nuestra indignación contra el régimen del 78 que desgastado se está reinventando para poder seguir agrediendo al pueblo. Cada día se hace más necesario un nuevo proceso consituyente nacido del pueblo, por y para el pueblo.
El rasgo más destacado de la investidura de Rajoy es que inaugura el gobierno más débil y el periodo de mayor inestabilidad política que se ha conocido desde la Transición.
Tras más de dos años repletos de citas electorales y de ilusiones acerca de que votando a una determinada opción política se resolverían los gravísimos problemas de la clase obrera y del pueblo trabajador, quienes nos hemos venido movilizado hemos venido planteando que, fuera cual fuera el próximo gobierno que se formara, los grandes poderes económicos representados por la UE y el FMI iban a obligar – exactamente igual que hicieron en Grecia – a imponer nuevas contrarreformas laborales, más recortes de las pensiones, y más degradación y privatizaciones de los servicios públicos.
Recordamos por lo tanto que cuando la supuesta crisis arrecia y los mandatos de la UE y el FMI son más imperativos que nunca, no vale – como se demostró con Syriza – otra estrategia que prepararnos para ENFRENTAR A LA TROIKA Y A QUIÉNES PRETENDEN NEGARNOS EL DERECHO A una vida digna.
En esta ardua tarea es preciso identificar – y aprovechar – bien sus contradicciones.
La inestabilidad de la que políticos y tertulianos se lamentan refleja la inevitable debilidad del gobierno para adoptar los recortes exigidos por Bruselas (calculados en más de 20.000 millones de euros) frente a un pueblo que ya está viviendo situaciones límite y que no está dispuesto a tolerar más empujones hacia el abismo. Las ya precarias condiciones de vida de millones de personas no aguantan ni un recorte más.
La inestabilidad significa que las clases dominantes son más débiles, están más divididas y son menos capaces de engañar al pueblo. Por eso, lo que a ellos les hace temblar, puede ser – si la sabemos aprovechar – una gran oportunidad para fortalecer la movilización social y el poder de la clase obrera y del pueblo. Y podremos hacerlo siempre que no nos embauquemos en falsas ilusiones y tengamos bien claro que la lucha es el único camino y que nos espera una gran tarea de organización y de combate.
En tanto se acusan unos a otros de corrupción, cunde la percepción de que hay dos tipos de ladrones en el capitalismo: los que ya conocemos y los que no se ha destapado todavía. El Régimen del 78, empezando por la Monarquía, se resquebraja y deja al desnudo una Transición que sólo cabe deslegitimar desde su origen.
Sabemos que el mensaje de que salimos de la crisis es pura propaganda. La crisis del capitalismo es general y no ha hecho más que empezar. Y sus únicas “soluciones” son incrementar el robo a la clase obrera mediante la explotación y el pillaje de materias primas mediante la guerra.
En estos días se confirma lo que ya sabíamos: se recuperará poco más del 5% de los 200.000 millones de euros de dinero público (¡¡el 20% del PIB!!) puestos a disposición de los grandes bancos y multinacionales. Es el pago de esa Deuda Pública a estafadores y especuladores y el cumplimiento de los objetivos de déficit, los que están consagrados como prioridad absoluta por el artículo 135 de la Constitución. Se impone una evidencia: no hay soberanía ni políticas alternativas si aceptamos pagar la Deuda y seguimos en el Euro.
Mientras nos están dejando sin trabajo, sin casa, sin sanidad, sin pensiones, sin educación, sin estudios, sin futuro y sin vida, la respuesta a la movilización social contra estas criminales políticas, el gobierno aumenta la represión. Las distintas leyes, como la “mordaza” o las “antiterroristas” les sirven para encarcelarnos y recortar derechos y libertades. A medida que las cárceles se llenan y las multas arrecian contra quienes luchamos, se muestra con mayor claridad la herencia de la Dictadura que impregna las instituciones surgidas de la Transición. Urge levantar de nuevo el clamor colectivo por la AMNISTÍA Y LA LIBERTAD de todos los presos y presas.
La cara más brutal del capitalismo en crisis es la guerra. Las intervenciones de la OTAN en distintos puntos del mundo son las responsables del drama de los refugiados. Generan guerras imperialistas y usan nuestros impuestos para financiar la masacre de otros pueblos, mientras los fabricantes de armas obtienen beneficios récord.
Es hora de romper sus reglas del juego, de tomar la iniciativa, de recuperar la calle, las movilizaciones, de organizarse, de extender en los barrios, fábricas, facultades e institutos la organización. Es preciso crear en cada pueblo y en cada barrio Comités que coordinen y fortalezcan las luchas diversas de empresas, o por la vivienda y contra los desahucios, o por los servicios públicos, etc. y sobre todo, para – en ese combate – construir nuestro propio poder.
Por todo ello lo decimos alto y claro la lucha es el único camino. Las Marchas de la Dignidad queremos preparar así, construyendo la unidad en la lucha, la importante movilización que las Marchas preparan en todo el Estado español el próximo 3 de diciembre, cuando – con toda seguridad – el próximo gobierno estará adoptando nuevas medidas que nos golpearán aún más duramente. Somos conscientes de que el 3 de diciembre será un primer hito. La ofensiva va ser larga y dura y es preciso empezar a prepararse cuanto antes.
¡No al gobierno de la corrupción!
¡La lucha es el único camino!
Debe estar conectado para enviar un comentario.