El cuerpo policial de los Mossos detuvieron ayer martes 28 de enero a seis compañeros anti- fascistas en los barrios y localidades de San Andrés, Hospitalet, Sant Feliu y Vilanova y la Geltrú. Por otro lado, durante la madrugada, en torno a las 06:30, el mismo cuerpo represivo, en un despliegue casi militar, procedió a registrar el centro social okupado Can Vies en Sants con cerca de 200 agentes.
En una nota presuntamente aséptica se nos informaba de que esta operación se enmarca en el proceso judicial de los hechos ocurridos el pasado 12 de octubre. Quizás en esta vida tan rápida todos y todas olvidamos con demasiada facilidad, pero dicen q hay quien mantiene el dedo en el gatillo de la memoria para combatir tanta amnesia interesada.
El pasado 12 de octubre España en Marcha estuvo amenazando la convivencia de esta ciudad intimidando implícita y explícitamente a cualquier persona q no piense como ellos, con una marcha multitudinaria en la q vendrían a «cazarnos» y a limpiar nuestras calles «de ratas separatistas». Dijeron q llegarían hordas en autocares, y lo dijeron después de atacar el acto oficial de la Generalitat en Madrid, el pasado 11 de septiembre. Debemos recordar que España en Marcha la componen una amalgama de grupúsculos de ultra derecha, Democracia Nacional, Falange, Nudo patriota Español, o la neonazi Alianza Nacional, el dirigente de la cual, Pedro Pablo Peña, había defendido la «lucha armada «y el derramamiento de sangre» en defensa de la integridad territorial española.
Una convocatoria, en definitiva, de carácter provocativo y amenazante, que enlaza con la tradición de agresiones y persecuciones que intentan practicar cada 12 de octubre, el día de la raza según ellos, contra todos aquellos que consideren sus enemigos.
Ante tantas fanfarronadas y cansados de tanta impunidad, los movimientos sociales de Barcelona, decidimos movilizarnos y salir a la calle para impedir la presencia del fascismo en nuestra ciudad. Fue esta respuesta la que impidió que pudieran desfilar por el barrio de Sants, y no es necesario que recordemos que su acto fue única y exclusivamente apología del fascismo/franquismo con toda su simbología, por cierto, pre-constitucional e ilegal. ¿Hay q recordar ahora cuáles han sido las consecuencias del fascismo en nuestro país, en concreto, y en el resto del mundo? Por favor, que no nos venga nadie ahora con discursos políticamente correctos o que nos hablen de la defensa y los derechos que tienen los que nos han asesinado mil veces y nos han dejado en las cunetas de la historia. La neutralidad ante el fascismo se convierte falsa, se convierte en un posicionamiento peligrosamente cobarde. Qué ridículo resulta querer aplicar leyes hechas por los vencedores y hablarnos de democracia, tolerancia, entendimiento . . . lo único que es cierto es que el avance del fascismo nunca ha sido detenido por el institucionalismo ni por traidores que dicen representar al pueblo, sino por el empuje de los que les hemos plantado cara a la calle, de manera auto-organizada.
Enmarcamos esta operación policial, por tanto, no sólo en la debilidad sino también en la complicidad que el Estado muestra ante estos grupúsculos, y en la escalada represiva general que vivimos hoy en día, mediante la cual se trata de neutralizar la combatividad creciente que día a día mostramos cada vez más sectores sociales.
«Nos Estáis obligando a sentir cada vez más odio», escribió alguien como clara advertencia, porque cada día estamos más incendiarios y más anti-fascistas y más anti- capitalistas y más convencidos de cuál es nuestro camino y cuáles son los errores que no estamos ni dispuestos ni dispuestas a volver a cometer.